Dudas, dudas ¡oh! Dudas

¿Es tu mirada el reflejo de tu alma
O es solo una mueca estudiada?
Dudas, dudas ¡oh! dudas

¿Son tus palabras sinceras
O son un guión reutilizado?
Dudas, dudas ¡oh! Dudas

¿Son tus gestos tu sentir
O solo son inercia de ayer?
Dudas, dudas ¡oh! dudas

Suave oleaje

Cerré los ojos
respiré hondo,
cedí mi peso
y floté.

Sentí la levedad
lo frágil de lo humano
el suave movimiento de las olas
el sonido interior de la mar.

El tiempo se dilataba
los segundos se aferraban
a lo efímero del presente
y tardaban en pasar.

Mientras los rayos del sol
jugueteaban con el agua
y peleaban por tocar mi piel
a veces ganaba sol otras agua.

El momento parece eterno
y aparece la incertidumbre.

Abrí los ojos al sol
que fuerte brillaba arriba
y a lo lejos esperaba
la arena de la orilla.

El cuerpo recuperó su peso
quería descender
pero las brazadas se sucedieron
y comencé a acercarme a tu playa.

Ahora la respiración era más fuerte
uno-dos-tres dentro
uno-dos-tres fuera.

El corazón funcionaba a toda máquina
los pies aleteaban atrás
todo sincronizado a un mismo compás

Y llegó el fin del agua,
y mi cuerpo tomó contacto con el aire
con la tierra,
pesó todavía más

Erguido como una mole
caminé hasta tu lado
donde me tumbé
a escuchar a las olas.

A veces

A veces me miro
y veo una sonrisa escondida entre los labios
pequeña, discreta
que intenta escapar de su condena

A veces me pienso
y me pesan las hojas que dejé volar
sutiles, frágiles
que ajenas a su papel se dejaron llevar

A veces me siento
y estremezco lo que se pone a mi alrededor
introvertido, sensible
forzando el ceño a fruncirse sin remedio

La inevitable experiencia

El tiempo se sucede,
segundo a segundo,
inevitable.

Y se descubre el mundo,
segundo a segundo,
inevitable.

De lo oculto se desvela,
esquemas y engranajes,
que complican la manivela,
a maniobras de espionaje.

Aparecen en tus labios,
fríamente calculadas,
las palabras que ni sabios,
en sentidos descifradas,
excitan los corazones,
de los pobres desdichados,
que sin atender a razones,
te siguen, cegados.

Por un tiempo tu oratoria,
hace al nimio infante creer,
que en su tierra la victoria,
ciertamente va a caer.

Pero el tiempo poco a poco,
hace al infante ver,
que todo es una artimaña,
para a él poder poseer.

Y la vida le va enseñando,
segundo a segundo,
inevitable.

Y va definiendo su rumbo,
segundo a segundo,
inevitable.

De quereres y te quieros

Te quiero,
cada vez que me dejas mirarte a los ojos,
cada vez que me susurras, que me dices que me adoras,
que me quieres, que si estás lejos de mí me añoras,
que no puedes aguantar las semanas deseosos

Pero no te quiero
cuando te siento carnal,
ávido de devorar
de sudar, de gozar
del placer más terrenal.

Me ilusionas, me llenas, me enloqueces
haces que un día cualquiera sea algo especial,
lo llenas de alegría, de tontadas, de sandeces,
me conquistas, siendo atento y muy jovial.

Pero me llenas de pena,
de dudas, de inseguridad.
¿Seré yo de verdad importante
o sólo seré uno más?

Dime que me quieres,
pero dímelo de verdad,
que te salga de tu alma,
y no sean palabras forzás.

Quiéreme sin condiciones,
sin promesas,
sin reproches:

querámonos los dos juntos
pero querámonos ya.

No me digas, dímelo

Tristes los despojos de mi alma
desfilaban ante tus ojos
impasible tu mirada
como si no pasara nada

Ya no salen te quieros de tus labios
se quedaron sellados
por orden del hastío
del corazón helado

Espero con impaciencia
que te vayas
que desaparezcas
que me digas adiós
y no alargues más
este sinsentido

No me digas, dímelo

Dímelo claro
dime que no
no me dejes en el limbo
No me digas que me quieres
pero que no

No me digas que me echas de menos
pero que no puedes verme
Ni me digas que me necesitas
pero que no puedes verme más

No me agarres más
sácame de tu cárcel
dame libertad

No me digas, dímelo

Dime que soy libre
que ya no quieres más
que esto es todo una mentira
y que jamás sentiste ná

Dime que tus besos
no eran más que algo del sexo
dime que tus palabras
eran parte del guión
para que cayese en tu trampa
y me tuvieses a tus pies

Dímelo por favor
dímelo ya
ten valor

No me digas, dímelo.

Besos mudos

Busquemos nuestro hueco,
nuestro rincón perdido,
allá donde pueda ser sabido,
que no somos solo dos amigos.

Confesemos a los muros,
a las sombras,
los lugares oscuros:

Que eres tú lo que yo quiero,
que soy yo tu Rey Moruno,
que nos amamos en silencio,
que nos amamos en lo oscuro.

Déjame darte mis besos,
pídeme que te de uno,
que mis brazos sean los tuyos,
y que tú y yo seamos uno.

Quédate quieto mirando,
en el fondo de mis ojos,
palabras tu y yo despertando,
nuestros rostros los sonrojos.

No soltemos nuestras manos
y vivamos esto hermoso,
no seamos inhumanos.
y queramonos, precioso.

Borrador 01

Mantuvo la cabeza todo lo alto que pudo
con lágrimas inevitables cayendo
llanto desesperado, desconsolado
berrido de un infante en un hombre

Lloraba al final del mundo
donde nadie le veía
era el fin para él
nada más tendría sentido

Tragó saliva
se secó las lágrimas
y volvió hacia la ciudad
con una sonrisa fingida

Su cara reflejaba ausencia
pasividad, estoicismo
pero su mente volaba
y sujetaba lo que se le acababa de ir

Hoje precisso

Mis brazos te buscan
sabiendo que no estás
los ojos se cierran
y empiezan a imaginar

El vacío se queda entre tú y yo
tremendo e inmenso vacío
insondable
indestructible

Mis brazos te buscan
una vez más
sueñan, recuerdan
olvidan

Y no vuelves
no basta con desear
ni buscarte
porque ya no hay nada

Mis brazos te buscan
y preguntan
¿dónde estás?
El silencio contesta

Una lágrima se asoma
quiere salir
quizá a buscarte
pero se hunde en la mejilla

Mis brazos te buscan
añorando abrazos fuertes
carnes unidas
olor a hombre

Y no hay nada que hacer
el adiós se pronunció
con toda la contundencia
no cabe otro sentido

Mis brazos te buscan
sabiendo que no te encontrarán
se desvanecen
se relajan

La ilusión se desplomó
y abajo se quedó
ya no me queda nada más
que regocijarme en tu recuerdo

Será el tiempo que nos va haciendo cambiar
pero ya no te veo como te veía antes
ya no me vuelvo loco
ni respiro tan fuerte al verte

Ni siquiera ya eres nadie
ya no me robas el sueño
ni te cuelas en ellos cuando los tengo

Nadie, una mancha lejana
emborronada
un lejano recuerdo

Aquellos cafés se diluyeron en el tiempo,
esas conversaciones, ese trato, esas sonrisas
esa complicidad ya enterrada.

Ya puedo verte y o sentir nada
puedo verte a metros y pasar
como si nada hubiese pasado

Ya te he olvidado
ya estoy curado :)

Forever as One

Ojala pudiera volver atrás en el tiempo,

ojala jamás tuviese que haber visto esa mirada en ti,

me rompiste el corazón,

ahora es el momento de asumir que esta despedida es para siempre

Así que aquí estoy

completamente solo

no llego a entender dónde nos equivocamos

no puedo dejar de llorar

ni soportar el dolor

sabiendo que no vas a volver

Se clava como un cuchillo,

pierdo la cordura

deseando que me ames

otra vez

Estoy volviéndome loco

pero tengo que seguir

trataremos de de estar juntos

como lo estuvimos ayer

¿Así que aquí es dónde la historia acaba?

me llevará un tiempo el secarme las lágrimas,

Me dijiste que podríamos ser amigos

ahora entiendo que tus promesas no fueron otra cosa que mentiras

Y allí me esperaba él,
tan dormido y tan despierto,
tan flácido y tan erecto,
tan cabrón y tan atento,
dibujando en mojado papel

Uno y ciento de promesas,
de castillos encantados,
de príncipes sin princesas,
que lloraban desconsolados,
esperando una respuesta.

La gritaba el endiosado,
afirmando que era cierta,
más quedó muy demostrado,
que de mierda se alimenta.

¡Sácala ya! ¡Pervertido!
Exclamaba el de delante
¡Desgraciado! ¡Malparido!
Ya se durmió el elefante
¡Esto no tiene sentido!

Matías Lisandro

00:55

La marabunta se calmó
el asfalto se distingue de la hilera de coches
que hasta hace poco lo cubrían

Un soplo se cuela entre la contaminación
mis pisadas se distinguen del barullo ausente
no hay bocinas

los semáforos regulan un tráfico inexistente
puedo cruzar la ciudad en un suspiro
ahora que nadie está mirando

Me abstraigo
no hay nadie con quien cruzarme
el reloj no marca la hora de llegada

Desacelero el paso y respiro hondo
a las 00:55
la ciudad descansa

Nada queda ya

Nada queda ya
el eco de tu voz lo difuminó el tiempo
la plenitud que brindaba tu presencia

Tan pasado que ya no eres nada
del todo que fuiste
de los sentimientos que creaste
las sonrisas que robaste
las noches que pintaste de blanco

Nada queda ya
un libro caducado
promesas que se desvanecieron
en tiempos que muy atrás quedaron

Hoy no duele tu ausencia
ni quema tu recuerdo
puedo pasar a tu lado
y sentir indiferencia
ni mirar
ni ¿que tal?
nada raro

Nada queda ya
ni firmas de años antiguos
ni fotos de rostro aniñado

Solo un borroso recuerdo
en el que tu estabas aquí
a mi lado