Cerré los ojos
respiré hondo,
cedí mi peso
y floté.
Sentí la levedad
lo frágil de lo humano
el suave movimiento de las olas
el sonido interior de la mar.
El tiempo se dilataba
los segundos se aferraban
a lo efímero del presente
y tardaban en pasar.
Mientras los rayos del sol
jugueteaban con el agua
y peleaban por tocar mi piel
a veces ganaba sol otras agua.
El momento parece eterno
y aparece la incertidumbre.
Abrí los ojos al sol
que fuerte brillaba arriba
y a lo lejos esperaba
la arena de la orilla.
El cuerpo recuperó su peso
quería descender
pero las brazadas se sucedieron
y comencé a acercarme a tu playa.
Ahora la respiración era más fuerte
uno-dos-tres dentro
uno-dos-tres fuera.
El corazón funcionaba a toda máquina
los pies aleteaban atrás
todo sincronizado a un mismo compás
Y llegó el fin del agua,
y mi cuerpo tomó contacto con el aire
con la tierra,
pesó todavía más
Erguido como una mole
caminé hasta tu lado
donde me tumbé
a escuchar a las olas.
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1 comentario:
Hola Pasajero!!!!
Bueno, bueno, que descubrimiento...me encanta todo lo que escribes!!!
Entré de causalidad en tu blog buscando en la red el texto anónimo de "Después de un tiempo..." y ya me he leído todos tus blogs!!!!jajajaja
Gracias por el texto, gracias por alegrarme la mañana y muchiiiisimas gracias por llevarme de viaje virtual a uno de mis lugares favoritos...el mar.
Un saludo y mucha luz en tu vida
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